Había una vez un Señor que se llamaba Raymundo que tenia dos hijos, una mujer y un varón.
El decía que no podía mantener a sus hijos, porque no tenia que darles de comer.
Un día decidió llevar a sus hijos al bosque y su prioridad era hacerles perder y dejarlos ahí.
Logró su cometido, y los dos niños se quedaron perdidos en el bosque sin saber a donde ir.
Los niños caminaban, caminaban y no llegaban a ningún lado. Hasta que de pronto encontraron una casa donde vivía una viejita, ella les recibió con mucho gusto, pero lo que los niños no sabían era que ella era una bruja.
La señora siempre hacia su chicha de maíz en ollas grandes.
Un día hablaba sola y decía: -Colgaré este racimo de plátano acá arriba y les diré a los niños que lo bajen y mientras los dos suben yo derribaré la escalera y caerán a la olla donde me los podre comer-
Pero lo que ella no sabia era que todo eso ya habían escuchado los niños y decidieron que si les llamaba para que bajen el racimo de plátano ellos no subirían y mandarían a ella.
A la mañana siguiente la bruja les dice a los niños que vengan a ayudar a bajar este racimo de plátano; Ellos le dijeron que no sabían subir y que les enseñe.
La bruja subió la escalera a bajar el racimo de plátano, en eso los niños derriban las escalera y la bruja cae al agua hirviendo.
Los niños le dicen: -Ves que no te salio tu plan de comernos-
De esa manera el papá regresa a buscar a sus hijos y se los llevas juntos con él.
Y prometió que nunca más los dejará solos.
bien miluzka..:)
ResponderEliminargracias giani
Eliminarlindo
ResponderEliminargracias fide
EliminarBiennnn.
ResponderEliminarBiennnn.
ResponderEliminargracias lucy
EliminarNuya Nuya
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